domingo, 28 de noviembre de 2010

Guerra de fotógrafos: El mejor precio

Perdonad, pero llevo unos días un poco liada y no he podido dedicarle al blog ni un segundo! pero... aquí estoy!


Hoy os voy a contar nuestras aventuras con la elección del fotógrafo, para llegar a Adrian Tomadín tuvimos que sufrir un rosario de "profesionales" con muy poca profesionalidad y mucha cara dura.


1º :Un padre nos presentó el trabajo de un fotógrafo ( que era el que le ha hecho las fotos a sus hijas, son mellizas, y seguro que en el precio del estudio estaba también el de la iglesia) del que nunca supinos nada , solo los mensajes que nos mandaba a través de este padre, el nos enseñó unos álbum espantosos imposibles de ver y nos dio un presupuesto, este fue variando a la baja de manera nada profesional dependiendo de los cambios que nos iba dando Adrián, solo puedo decir que nos pareció impresentable, y un cara dura, porque ni él mismo valoraba su trabajo, solo quería hacerlo y estaba dispuesto casi a regalarlo.


2º :Otra madre nos propuso a otro fotógrafo, que este si se presentó en la iglesia a presentarse, pero.... no nos trajo ni fotos ni album!!! no se como quería que decidiésemos!!!!, este señor solo nos hablaba de lo bien que lo hacía y nos daba precios que según iba viendo nuestras caras los iba bajando!!! que espanto, que imagen más poco clara. no nos gustó nada.


3º : finalmente entra en escena el fotógrafo de la parroquia, me llamó a mi porque sabía que era la tenía el candidato "mas fuerte", imaginaros la situación, yo a tope de trabajo, en el mes de marzo con todos los vestidos de primera comunión, con sus pruebas y sus problemas y.... me llama un fotógrafo para amenazarme con que si no hacemos las fotos con él, el párroco se va a enfadar y no va a dejar que hagamos la comunión!!!, me entró un ataque de ... bueno no lo digo y claro lo mandé a la porra. 




Con este plantel de fotógrafos y viendo que podía ser un trabajo interesante, empezó la verdadera diversión para nosotros, porque empezó una guerra de precios, nos lo pasamos genial porque casi casi uno de ellos nos regala las fotos!! llegamos a pensar que si apretábamos un poco más seguro que nos regalaban un viajecito, ja, ja. 


En resumen, como referencia debéis tener en cuenta, que se puede elegir entre album digital o convencional:


Album Digital: está muy de moda ahora, consiste en un album parecido a un libro con fotos impresas en la hoja del libro ( como ilustraciones) este tipo de album es más caro , a nosotros nos cobraban 250€ e incluía 30 fotos. Esta opción a mi me gusta y la he elegido pero  le he pedido al fotógrafo que incluyese fotos hechas por mi familia o por mi  durante la celebración, estas fotos son más divertidas y la niña ya estaba más relajadao, para que se quede como un recuerdo para la niña, yo he incluido fotos de la primera confesión también y escaneados los recordatorios ( así Ichi tendrá un recuerdo total de su primera comunión) y además no se perderá nada porque es un libro.


Album clásico: si  pedís varios presupuestos os diré que un buen precio es el de 9€ por foto, pero no incluye el CD con todas las fotos hechas a tu hijo. pero si conseguis que os lo dejen   la foto  a 12€    incluyendo  el CD con TODAS LAS FOTOS HECHAS A  VUESTRO HIJO ,   os confirmo que es un precio estupendo.


IMPORTANTE. conseguir que os den por el mismo precio el CD CON LAS FOTOS DE LOS NIÑOS , ahí está el verdadero ahorro ya que seguro que las abuelas o las tías te van a pedir copias y las puedes sacar tu en la tienda donde te hacen las copias a precio normal!!!




  


   El  vídeo es otra cosa importante a decidir , ya que normalmente os lo van a cobrar en función de la cantidad de niños , a nosotros nos cobraban 600€ a pagar entre 22 niños . 


Nosotros no quisimos vídeo porque ahora todo el mundo tiene máquina fácil de usar  y no queríamos gastarnos más dinero. 


Personalmente me arrepiento!!! es un recuerdo estupendo y aunque yo estaba en la segunda fila y pude grabar bastante bien toda la ceremonia, el momento en que Ichi recibió la comunión, empecé a llorar como una loca y no fui capaz ni de encender la cámara, es más ni me acordé de la dichosa máquina!!!! que emoción!


















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